Área Costera Protegida: Punta Curiñanco, Un lugar imperdible en Valdivia
Si te gusta el contacto con la naturaleza mientras disfrutas de unas merecidas vacaciones, el área costera protegida Punta Curiñanco es el lugar ideal para alejarte del estrés que producen la vida urbana y la rutina diaria.
Ubicada en la región de Los Ríos, en Chile, específicamente en la comuna de Valdivia, tiene una extensión de 82 hectáreas, y es un paraje extremadamente rico en biodiversidad, en el que se busca potenciar el ecoturismo para contribuir con el desarrollo sustentable de la localidad.
¿Piensas viajar a Chile? Si es así, queremos compartir contigo una guía con los atractivos de esta área protegida y sus actividades recreativas, para que no dejes de visitarla y la incluyas en tu itinerario de viaje.
¡No te despegues!
Recorre sus 4 senderos
Puedes adentrarte en el área costera protegida Punta Curiñanco a través de sus 10 kilómetros de rutas, que se dividen en 4 senderos autoguiados de baja complejidad. Deleita la vista con la dinámica natural del bosque es, sin duda alguna, es una de las actividades preferidas por los visitantes.
El acceso a este lugar es facilitado por el guardaparque Rodrigo Bastidas, designado por la ONG ambientalista chilena Comité Nacional Pro-Defensa de la Flora y Fauna (CODEFF), organización que compró estas 82 hectáreas en el año 2000 y, por lo tanto, es responsable de la administración de la reserva.
Estos angostos senderos, llenos de equilibrio y armonía, muestran lo mejor de la selva Valdivia, además de estar muy bien demarcados y señalizados. Al ser un camino en círculo, solo tendrás que preocuparte por seguirlo hasta volver al punto donde iniciaste. ¡Pan comido!
Estos senderos son conocidos como:
- Mirador Chungungo.
- Costero.
- Bosque Olivillos.
- Los Melies.
Al realizar este recorrido puedes tardar aproximadamente dos horas a un ritmo más bien tranquilo, haciendo algunas paradas para descansar y tomar aire fresco, y la posibilidad de poder contemplar todo el esplendor de la naturaleza.
No olvides, además, que el senderismo es una excelente actividad física que ayuda a mantenerte saludable, aportando beneficios para el cuerpo y la mente. ¿Qué más puedes pedir?
Observar su fauna y flora
En el primer sendero conocerás la verdadera esencia del área costera protegida Punta Curiñanco, es decir, todas las especies de plantas y animales que hacen vida en el lugar.
Sobre la fauna cabe mencionar a los copihues (la flor nacional de Chile), arrayanes, canelos, olivillos, lingues, melis y romerillos, entre otros.
En cuanto a la fauna, la diversidad es mucho mayor, parte de la cual se encuentra protegida debido a su riesgo de extinción. Si te gustan los animales, echa un vistazo a los que te puedes conseguir en el camino:
- En la costa: chungungos (también llamados gatos marinos), cormoranes imperiales, yecos (mejor conocidos como cuervos de mar), liles, churretes costeros (una especie de ave que solo verás en esta zona del mundo) y lobos de mar.
- Al interior de la reserva: pudúes, huiñas (una especie de felinos que habita desde la zona central de Chile hasta la Patagonia) y zorros chillas (conocidos como zorros grises patagónicos).
- En el aire: el chucao, el carpintero negro (uno de los cuatro pájaros carpinteros que habitan en Chile), el huet-huet, el cormorán lile (lo reconocerás por plumaje gris plateado y su pico amarillo), el aguilucho y el fío-fío (llamado así porque su canto se asemeja a un silbido).
Como si fuera poco, a lo largo de la ruta hay 3 grandes miradores, que harán de tu experiencia algo increíble. Se trata del mirador Del Mar, Olivillo y El Chungungo, que se encuentran en lo alto de los acantilados, y desde donde podrás contemplar las hermosas vistas de la costa.
Centenario Bosque de Olivillo
Al final del sendero Bosque Olivillo encontrarás un lugar majestuoso, considerado por muchos el mayor atractivo que ofrece el área costera protegida Punta Curiñanco: el centenario Bosque sagrado de Olivillos.
Su nombre proviene de los frutos que crecen en él, que presentan la forma de pequeñas aceitunas u olivas. Por su parte, al árbol Olivillo también se le conoce como “palo muerto” debido a la apariencia de sus hojas, pero, en realidad, es un árbol muy bonito y llamativo.
Pueden vivir más de 300 años, medir más de 20 metros de altura, y su tronco puede llegar a tener hasta 1,7 metros de diámetro. Se estima que, incluso, existen algunos olivillos que superan los 750 años de antigüedad. ¡Cierto es que la naturaleza nunca deja de sorprendernos!
Como dato curioso, se dice que representa un sitio sagrado para el pueblo Mapuche (la comunidad indígena más numerosa de Chile) debido a que allí solía haber un antiguo cementerio. Además, sigue siendo un lugar ceremonial con un místico ambiente de espiritualidad.
Lo que debes tener en cuenta
¿Convencido de visitar el área costera protegida Punta Curiñanco? Si es así, toma nota de los siguientes tips para amenizar mejor tu experiencia:
- Si bien es una ruta sencilla de recorrer, que no requiere de habilidades físicas ni equipamiento especial, es recomendable usar ropa cómoda y zapatillas adecuadas para senderismo;
- No es posible entrar con mochilas, las cuales quedan en resguardo del guardaparque. Podrás llevar una botella de agua;
- El horario de atención varía según la época del año, y no abre los días lunes ni festivos;
- Es accesible tanto en auto propio como en transporte público;
- Por último, pero no menos importante: no olvides tu cámara.
¿Sabías de la existencia del área costera protegida Punta Curiñanco? Es un sitio mágico y muy poco intervenido por la mano del hombre, sin duda una experiencia que no puedes dejar de vivir.
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